seda y fuego

| No Comments | No TrackBacks

 

 

SE vistió lentamente,

como si el tiempo fuera un aliado de su juventud.

La ropa se deslizaba por su piel

con un rumor de seda y agua.

En la orilla del mar,

las olas derribaban los castillos de arena,

y con sus lenguas de espuma borraban las huellas de la playa.

El mundo se iba haciendo viejo gota a gota,

grano a grano, latido a latido,

y planetas enteros eran devorados

por la boca ciega e impasible de la nada.

Sentí vértigo de  perderla, de perderlo todo,

si bien me consoló pensar, que con todo lo demás,

el dolor también se acaba.

 

 

No TrackBacks

TrackBack URL: http://calipsopapeleria.zonalibre.org/cgi-bin/mt-tb.cgi/19314

Leave a comment

About this Entry

This page contains a single entry by calipsopapeleria published on March 26, 2010 12:23 PM.

¡coma, padre! was the previous entry in this blog.

luciérnagas apagadas is the next entry in this blog.

Find recent content on the main index or look in the archives to find all content.